Dana Lane
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El trastorno afectivo estacional (SAD, por sus siglas en inglés) es un tipo de trastorno depresivo que se presenta en determinadas épocas del año, generalmente durante el otoño e invierno en lugares con poca luz solar. Los síntomas del SAD son similares a los de la depresión, pero suelen ser más leves y desaparecen por sí solos en la primavera o el verano.
Los síntomas del SAD pueden incluir tristeza, irritabilidad, fatiga, falta de energía, dificultad para concentrarse, cambios en el apetito y el sueño, y pérdida de interés en las actividades que antes eran placenteras. Al igual que con otros trastornos depresivos, el SAD puede tratarse con terapia y/o medicamentos. Además, ciertas estrategias como la exposición a la luz brillante y el ejercicio regular pueden ayudar a reducir los síntomas del SAD.
El trastorno afectivo estacional (SAD) puede afectar tanto a hombres como a mujeres, pero se ha observado que las mujeres tienen un mayor riesgo de desarrollar SAD que los hombres. Se estima que aproximadamente el 60-90% de las personas con SAD son mujeres.
Los síntomas del SAD en las mujeres son similares a los observados en los hombres, pero las mujeres pueden experimentar síntomas adicionales relacionados con los cambios hormonales que ocurren durante el ciclo menstrual y la menopausia. Además, las mujeres con antecedentes de trastornos del estado de ánimo, como la depresión posparto o el trastorno disfórico premenstrual, también pueden estar en mayor riesgo de desarrollar SAD.
Es importante señalar que el SAD es un trastorno tratable y que las mujeres que experimentan síntomas de SAD deben buscar ayuda médica. El tratamiento puede incluir terapia de luz, medicamentos antidepresivos, terapia cognitivo-conductual y cambios en el estilo de vida, como el aumento de la actividad física y la exposición a la luz natural.
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